En mayo la balanza comercial del país registró un déficit comercial de 3 mil 523 millones de dólares, derivado de la caída de las exportaciones de México, principalmente de las petroleras, informó este viernes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El saldo acumulado del comercio exterior de la nación reportó un déficit de 2 mil 888 millones de dólares.
El valor de las exportaciones de mercancías en el quinto mes de este año fue de 18 mil 070 millones de dólares, cifra que representó una reducción anual de 56.7 por ciento.
Esto se explicó por la disminución de 63.8 por ciento de las exportaciones petrolera, cuyo valor fue de 929 millones de dólares.
Sin embargo, las exportaciones de mercancías no petroleras se redujeron 56.3 por ciento en mayo y tuvieron un valor por 17 mil 140 millones de dólares.
Al interior de las exportaciones no petroleras, las dirigidas a Estados Unidos cayeron a una tasa 57.2 por ciento anual, mientras que las destinadas al resto del mundo lo hicieron en 51.8 por ciento.
El valor de las importaciones de mercancías fue de 21 mil 592 millones de dólares, monto que implicó una caída anual de 47.1 por ciento.
El resultado se explica por la caída de 69.4 por ciento de las importaciones petroleras, cuyo valor alcanzado fue de mil 399.3 millones de dólares, mientras que las importaciones no petroleras descendieron 44.3 por ciento y presentaron un valor de 20 mil 193.1 millones de dólares.
Por tipo de bien, se observaron descensos anuales de 55.8 por ciento en las importaciones de bienes de consumo, de 46.7 por ciento en las mercancías de uso intermedio y de 38.3 por ciento en las de bienes de capital.
Analistas de Monex resaltaron que el dato de mayo es el segundo correspondiente al segundo trimestre del año, por lo que al ser negativo resulta ser una mala noticia.
Señalaron que dada la caída que sostienen las exportaciones manufactureras y las importaciones de bienes intermedios y el hecho de que la reapertura de la industria en México se ha estado postergando durante junio, es posible que la actividad industrial no disipe las tasas negativas mensuales sino hasta el tercer trimestre del año, lo que podría limitar aún más la recuperación.